¿Es verdad o mentira, es cierto es falso?
- LA MAGIA DE LAS PALABRAS
- 19 nov 2018
- 7 Min. de lectura
Actualizado: 30 nov 2018
Elaborado por:
GARCÍA SANCHEZ JESSICA CORONA ALBA YASHADI CAZANDRA SIERRA RIVERA ELIZABETH ROJAS CASTRO MIROSLAVA CRUZ RODRIGUEZ ESTEFANNY CONTRERAS GONZÁLEZ ANA CRISTINA
Es difícil volver a comenzar después de un tropiezo tan horrible al grado de perder tu dignidad y amor propio, de perder la ilusión, de algún día volver a comenzar de cero y volver a amar a alguien más.
El tiempo cura todo, eso es una gran mentira. Siempre he creído que si realmente quieres a esa persona tanto, no la olvidas en unos días, a veces pueden pasar años; aunque te engañes a ti mismo diciendo que ya todo pasó, si es importante no pasa así de fácil como unos dicen.
Por esa persona sentí lo que jamás por alguien sentí: odio, amor, pasión, deseo, venganza, capricho, amistad… pasé por todos los sentimientos buenos y malos; y al final solo quedó una pregunta ¿Por qué?…
Todo comenzó hace dos años cuando conocí a ese chico Jesús, era su nombre; hace una semana entró al mismo trabajo donde yo me encuentro. Al principio creía que él era una molestia y sigo creyendo que es así, un día nos quedamos hasta tarde ya que al día siguiente teníamos que entregar un reporte, al terminar miré mi reloj y vi que ya era muy tarde y estaba lloviendo, al parecer el termino antes pues bajo primero, así que supuse que se había ido, termine mi trabajo y cerré la oficina, me dirigí hacia la entrada pero estaba lloviendo muy fuerte para poder irme, decidí esperar un poco para ver si la lluvia cesaba pero no fue así, esperé bastante tiempo pero seguía sin cesar así que opté por irme corriendo ya que era tarde y si no, no encontraría transporte, iba a ponerme en camino pero escuché que alguien gritó mi nombre así que busqué y vi a alguien en un carro, este abrió la ventana del lado del copiloto y observé a Jesús él me dijo:
-¿Andrea que haces ahí? ¡Vamos, sube!
Sin pensarlo corrí al auto y subí enseguida agradecí y él me preguntó por mi dirección:
- “n-no, no te preocupes Jesús, puedo irme en transporte solo es cuestión de que me acerque a una parada”
-no, tranquila, además ya a estas horas ya no hay transporte así que permíteme llevarte a tu casa
Miré la hora y eran casi las 2am así que le dí mi dirección, pasamos el camino hablando, para ser sincera es la primera vez que hablo con él, pues todas las chicas de la oficina están detrás de él, comprendí muchas cosas así que ya no lo creí como una molestia, al pasar el tiempo, llegamos a mi casa, me bajé y me despedí, le di las gracias y entré.
Pasaron los días, él y yo comenzamos a llevarnos bien, siempre me buscaba, aunque sea para molestar por lo que empezó a llamar mi atención y me empecé a hacer ilusiones y, al parecer, yo no le era indiferente, pero aun así no se animaba.
Pasaron los meses, a mí me gustaba cada vez más, aunque para ser sincera no era ni mi tipo ni nada. Pero algo de él me atraía fue pasando el tiempo así que decidí tomar la iniciativa, y lo conseguí era demasiado feliz, él era ló mejor que me había pasado, me invitaba a su casa y yo a la mía, salíamos a comer, al cine: una convivencia de en sueño.
Fue pasando el tiempo y conforme este pasaba, comencé a notarlo raro ya que algunas veces era muy infantil y otras muy serio, así que él me explicó que tenía un trastorno de doble personalidad así que trataba de apoyarlo, recuerdo que en la fiesta de fin de año de la empresa nos sentamos en una mesa, junto con más compañeros habíamos tomado algo pero yo no me sentía bien, me dieron ganas de ir al baño, opté por decirle a Jesús que me acompañara pues yo sentía que podía caerme
-claro vamos
Me agarré de Jesús y nos dirigimos al baño, entre y él me esperó fuera, me lavé la cara y salí, paso el tiempo y llego la hora de irnos a casa él estaba algo cansado así que yo fui quien condujo.
Al paso de los días notaba mucho más raro a Jesús, así que llamé a mi hermano Carlos pues él era psicólogo y nos ayudaría con su problema. Nos quedamos de ver en un parque, avisé a Jesús y él vino conmigo, llegamos al parque, hacia algo de calor, a lo lejos pude ver a mi hermano así que corrí a donde estaba el.
-| ¡hola hermana!, ¿cuánto tiempo?
- “si ha pasado bastante, o por cierto te presento a mi novio él es Jesús”
-|o, mucho gusto Jesús
- “b-bueno los dejo que se conozcan iré por unos helados”
Dejé a Jesús con mi hermano para que se conocieran, mientras fui por unos helados.
- “he regresado, o pero que tonta soy solo traje 2 y somos tres, ten Jesús puedes comer el mío.”
- ¡oh no!, no te preocupes no quiero gracias.
- “¿seguro?”
Le di su helado a mi hermano y lo aceptó con gusto.
Así pasamos un buen rato charlando y sin darnos cuenta se había hecho de noche, mi hermano dijo:
-| bien hermana me voy ¡cuídate! y deberían pasar por mi clínica vale
- “claro pasaremos”
Pasaron los días y continuaba viendo cada vez más mal a Jesús, un día por la tarde lo subí al carro ya que enserio quería ayudarlo, comencé a conducir y él me hacía preguntas como “¿A dónde vamos mami?, ¿Por qué iría allí?”. Llegamos a la clínica de mi hermano y pasamos a su consultorio.
-| bien necesito que te sientes Andrea
- “espera y donde está la silla para Jesús”
-| ¡oh!, claro enseguida la traigo.
Trajo una silla y Jesús se sentó, mi hermano comenzó a hacernos algunas preguntas.
-|bien quiero que me digas todo de su relación
- “¿q-q-que p-pero eso no es personal?”
-| si, pero necesito saberlo
- ¡no mami no le cuentes!
Mi hermano comenzó a presionarme y Jesús también no sabía qué hacer, subí mis rodillas a la silla y las abracé comencé a llorar con un sentimiento de… mi hermano empujó la silla donde estaba Jesús, pero…
-| ¡ya supéralo Andrea, tienes que superarlo, la que realmente necesita ayuda eres tú!
- “q-que cl-claro que no, y-yo…. ¡Yo no necesito ayuda estoy perfectamente bien!”
Quedé en silencio por unos segundos y de nuevo comencé a llorar ya que me había dado cuenta de que tenía razón había pasado tantas cosas, me calmé y mi hermano me miró.
-| ¿estás listas?
- “s-si” conteste indecisa
-|bien cuéntame todo
Suspiré y comencé a contar la historia.
Pues todo empezó cuando por fin me hice novia de Jesús hace algo ya de tiempo, éramos muy felices hacíamos muchas cosas juntos nos contábamos todo creo que era una excelente relación, él me conto…
Susurrando -n-no le cuentes
“Él me contó que tenía un hermano, un día le marqué para que saliéramos pero se escuchaba algo mal, así que decidí ir a su casa para poder hablar con él y animarlo, cuando llegué, lo vi y se veía más calmado pero lo noté algo raro, se veía muy infantil era algo muy raro en él, así que le pregunte; ¿qué era lo que pasaba? él me contó que tenía un trastorno de doble personalidad así que me propuso que no le dijera nada de lo que hiciéramos a su otra personalidad ya que no recordaría lo que había sucedido (pues se sabe que cuando eres una persona con doble personalidad, no recuerdas lo que paso en la otra personalidad), un día…”
- ¡b-basta no le cuentes!
Volteé a donde se supone que estaría Jesús y me calle.
-|trata de ser fuerte, bórralo tu puedes hacerlo… dijo mi hermano y proseguí.
“Un día estaba en su casa, estábamos teniendo relaciones en su cuarto, cuando se abrió la puerta era Jesús, yo no sabía que pasaba pues según yo estaba con Jesús, pero recordé que me había dicho que tenía un hermano llamado David pero nunca me dijo que eran gemelos, estos empezaron a pelear y agredirse, yo traté de separarlos pero uno de ellos me empujó y me golpeé la cabeza haciendo que quedara inconsciente, al despertar y observar la escena, estaban los hermanos ensangrentados uno con un cuchillo en mano y otro con una botella rota, me asusté tanto que quedé en shock no sabía que pensar Jesús nunca tuvo un trastorno, había estado saliendo con los dos hermanos pensando que era uno mismo, llegó un momento en el que a todos los lugares que iba los comencé a ver como si fueran personas normales, esto se hizo natural y los trataba como si fueran personas vivas.”
Me quedé en silencio…
Mi hermano me abrazó y me dijo que me ayudaría, correspondí a su abrazo, me internaron en un psiquiatra y con el paso del tiempo deje de ver a Jesús y a David, me sentía mucho más aliviada, un día mi hermano medio la noticia de que me darían el alta, pero en la noche, pero mientras dormía…
-¡hola mami!
- “¿q-que haces tú aquí?, tú no eres real”
- ¿de qué hablas mami?
Me encogí y comencé a repetir:
- “no vete, por favor desaparece, vete, no eres real, no eres real” comencé a llorar desesperadamente
-ja!, ¿crees que te libraras tan fácil de mi?
David tomó mi cuello y comenzó a apretarlo.
- “n-no, no puedo respirar, suéltame”
Al día siguiente cuando mi hermano iba a recogerme para poder iniciar una nueva vida, le informaron que había pasado algo muy grave, estaba muerta, los policías investigaron las huellas, pero… ya que mi habitación estaba cerrada y tenía las manos en el cuello, lo tomaron como un suicidio, un paciente dijo que había escuchado gritos, pero no le tomó importancia ya que eso era muy normal en ese lugar, mi hermano estaba destruido por tal noticia.
-|dios porque no le ayudé antes
Mi hermano estaba llorando en su consultorio, pero de pronto…
-hola ¿me recuerdas?
-| ¿t-tú? ¿Por qué?
…

(Rodríguez, 2009)
Me gustaron las lecturas por qué son cosas que pasan en la vida real y que algunas personas les afectan(unas más que otras)
Aún que en algunas palabras tenías unas cuantas faltas de ortografía pero fueron muy pocas y en las lacturas especificaban las cosas bien y eso ayudaba a que se entendiera mejor la lectura.